El Dragón Comparte lo Bueno. Bruce Springsteen. Por Enrique Sánchez Fernández

Les comparto a los pocos que me leen un brillante texto de un joven talentoso que alguna vez fué alumno mío en CRONOS Tiempo de Todo! y que orgullosamente puedo decir que es un honor el haber contado con su atención en clase y con su amistad a lo largo de mi vida:

Enrique Sánchez Fernández
¡Hola Bruce!
No puedo saludarte de otra manera. Disculpa que seas una superestrella, pero tus discos me acostumbraron a tratarte como a un amigo. Sirva de ejemplo la armónica íntima al principio de “Thunder Road”; la guitarra rebelde de “Adam Raised a Cain”, (esa te hacía sentir la sangre en las venas); y la energía de “Dancin´ in the Dark”.
Exactamente eso voy a vivir el 10 de Diciembre del 2012. Asistiré solo a tu concierto. No importa. Puedes vivir con la soledad, siempre que sepas lidiar con ella. Tú lo hiciste a través de tu trabajo. Sin embargo, con tus espectáculos, le diste toda tu pasión al público, entregándote al máximo. La fe siempre sido básica en tu carrera. Hasta donde sé, antes de ser famoso, dibujabas a Cristo crucificado en una guitarra. Tú sabías que era tu salvación. Como dirías tu mismo en “Badlands”: “Habla de un sueño/Trata de hacerlo realidad”. Tú lo hiciste Bruce. No solo trazase tu camino. Nos invitaste a todos en tu viaje. Muchas gracias, amigo. De verdad.
También te agradecemos aquella joya antológica en vivo: “Live 1975/85”. Una maravilla de principio a fin. Su objetivo: capturar la esencia de uno de tus shows en vivo con la E Street Band, a través de 40 canciones, 8 de ellas inéditas. Estos se reparten en las giras de “Darkness on the Edge of Town”, “The River” y “Born in the USA” básicamente. Del “Born to Run” apenas incluiste aquella tierna version, casi desnuda al piano de “Thunder Road”.
En lo personal, Bruce, si llegaras a tocar íntegro aquel “Live 1975-85” tal como está editado el 10 de Diciembre del 2012 en el Palacio de los Deportes, sería uno de los días más felices de mi vida, (aún con sus virtudes y defectos). Por cierto Bruce: ¿Por qué no incluiste, -entre las tantas canciones que se quedaron en el tintero-, la épica “Jungleland”, -de “Born to Run”-, ni “New York City Serenade”, -de “The Wild, The Innocent and the E Street Shuffle”, ni el segmento de “Sad Eyes”, -más tarde transformado en “Drive All Night”-, en el track “Backstreets” del mencionado “Born to Run” en la colección.
Respecto a este último CD, en el 2006 se editó el álbum “Live in Hammersmith”. Incluía versiones de 1975 repetidas en aquel “Live 1975-85” como “Thunder Road”, “Tenth Avenue Freeze Out”, “It´s Hard to be a Saint in the City”, “Backstreets”, “4th of July, Asbury Park, Sandy”, “Rosallita (Come out Tonight)”, -empleada para presentar a los músicos durante más de diez años-, y “Born to Run”. Aun así, disfruté este souvenir de la legendaria gira de 1975, aunque menos que tu primer álbum en vivo anteriormente mencionado.
En lo personal, “Live in New York City”, que corresponde a la gira de “Tracks, (1998), con temas inéditos de todos los álbums, está un poco más flojo. A pesar de ello, Bruce, mantienes la comunión con tu público. No importa que le bajes un poco el listón a la calidad de tu música. No en vano, “Lucky Town” y “Human Touch”, (ambos álbums editados en 1992), no tienen la calidad de antaño. Te lo perdono, Bruce. En el pasado me regalaste mil noches de diversión, música y pasión, (enfatizadas entre 1975 y 1985). En este periodo de tiempo se recogen dos álbums clásicos: el icónico “Born to Run”, (refleja las dudas, la rebeldía y la energía propias de la adolescencia), como el tirón comercial de “Born in the USA”.
Entre estos CD´s quedaba la amargura de los problemas, -reflejados en “Darkness on the Edge of Town”-, -1978-, -respecto a los problemas legales con tu manager Mike Appel en la gira y grabación del anterior trabajo “Born to Run”.
Independientemente, Jon Landau, crítico de la revista Rolling Stone, toma el relevo y te guía hacia un mejor camino. Consecuentemente, se convierte en tu manager, (y en un gran amigo), y se dedica a enriquecerte, promoverte y a ganar sus buenos dólares por tu calidad, reputación y calidad que te convirtieron en artista.
Esto ya lo intuía Jon Landau al verte actuar por primera vez, allá por el lejano 1974. Le impactaste tanto, que escribió una crítica reveladora para la historia: “He visto el futuro del rock and roll. Su nombre: Bruce Springsteen”. ¡Y tanto!. A partir de estos problemas reflejas la madurez, el optimismo y la diversión propia de un hombre de 30 años en “The River”, -1980-. Dicho placer dura poco ante una América más oscura en el álbum “Nebraska”, -1982-, y termina con el popular “Born in the USA”, -1984-, del que hiciste tu consabida gira mundial, recopilada en “Live1975- 85”, -1986-.
Déjame decirte una cosa Bruce. Lamento que Steve Van Zandt, tu íntimo amigo de la adolescencia, -como retratas en “Bobby Jean”-, abandonara la E Street Band. En su lugar lo sustituyó el guitarrista Nils Lofgren, y se añadió la corista Patti Scialfa, con la te casarías después de divorciarte de tu actual esposa Julianne Phillips.
Dos años de silencio pasaron, (hasta que en 1987 viera la luz “Tunnel of Love”). Este álbum refleja una curiosa ironía: exorcizaste las penas del amor con tu músico sobre tu matrimonio con Julianne Phillips, y en su respectiva gira, (“Tunnel of Love Express Tour”), intimarías con la mujer de tu vida Patti Scialfa, -que conociste hace tres años en tu anterior tour. ¿Recuerdas?-..
Pues bien, Bruce. Te fuiste. Nos abandonaste muchos tristes años, disolviste la E Street Band y te dedicaste a gozar de la vida, (¡Tú que puedes!). Cuando te cansaste de descansar, -después de cinco años de vacaciones-, editaste dos álbums, -en mi opinión y en la de la crítica-, algo flojos, y te convertiste en un feliz padre de familia.
Después de tu gira de promoción, (plasmada en aquel “Plugged” de la cadena MTV), grabaste “The Ghost of Tom Joad”, (inspirado en el film “Las Uvas de la Ira”, de John Ford, -1940-, que retrataba en un triste blanco y negro, la gran depresión americana). Consecuentemente tu álbum es más oscuro, -en mi humilde opinión más parecido a “Nebraska”-, tanto en su temática como en su formato acústico. Una vez editado, hiciste una gira acústica mundial en solitario.
Al terminar regresaste al estudio para publicar otra recopilación de tu carrera 1995, (“Greatest Hits”), nada más que esta vez en estudio. En dicho álbum incluías cuatro canciones inéditas. La mejor de todas, para mí-, “Streets of Philadelphia”, (de la película “Philadelphia”, -1993-), que aparte de hacerte ganar el Oscar elevó tu leyenda.
Llega 1999, y nos hiciste un gran regalo, mi estimado Bruce. Por una parte reuniste de nuevo a tu entrañable E Street Band, -con dos guitarristas de lujo: tu querido amigo de toda la vida: Steve Van Zandt y Nils Lofgren, con quien llevas trabajando desde la gira “Born in the USA”-, -1984-, hará ya, más o menos, quince años.
Bueno, desde aquel entonces, (a la fecha), han pasado doce años. ¿Y qué ha pasado?. Nada. Publicaste un álbum, (“The Rising”, -2002-), inspirado en el atentado de las Torres Gemelas en Nueva York en el 2001. A pesar de ser la música un poco solemne, -escucha “My City in Ruins” estimado amigo lector y te darás cuenta-. No por ello abandonaste la diversión. Por ejemplo “Mary´s Place” es una de tus canciones más divertidas que te he escuchado en años, -como “Cadillac Ranch”, -1980-). ¡Muchas gracias Bruce!. ¿Y qué hiciste después?. Nada fuera de lo común: giraste, ganaste un montón de billetes verdes americanos y disfrutaste como un niño. ¡Qué envidia!. ¡Los mortales tenemos que trabajar!.
Y bien, después de una larga gira vuelves a casa con tu familia, (más bien con tus tres hijos, (Evan, James y Sam), porque tu esposa Pattti te ha acompañado a todas partes desde 1984. Si me equivoco, es porque no me informaron. En realidad, nunca supe cuando ni como te divorciaste de tu anterior mujer.
Un poco antes, en el 2001, se edita el DVD “Live in New York”, (de la gira “Tracks” mencionada hace muchos párrafos atrás). Y bueno, aunque no es de mis favoritos, la crítica y muchos fans lo convierten en un objeto de culto. En lo personal prefiero el actual “Live in Barcelona” de la gira de presentación de “The Rising” al contener más clásicos. Eso sí, debo decir que el primer trabajo es mejor que tu primera presentación audiovisual “Video Anthology 1978-2000”, (publicada por primera vez en 1989).
Sin embargo tus DVD´s, así como tus álbums en vivo y la incontable discografía pirata nos demuestra a los fans, (tanto los que te han visto en vivo, como los que no, como yo), que un concierto tuyo es único. ¿Por qué?. Por algo básico: aunque no tocaras ninguno de tus clásicos, -impensable-, haces que tu público vibre. Tú sabes el motivo: “El día que no te veas reflejado en tu público, ése día se habrá acabado todo”. ¿Será por eso que eres leyenda?.
No lo sé. Quizás tú tampoco, y no creo que te importe. Actúas como una persona normal: vistes vaqueros, ocasionalmente te pones una camiseta, y en el proceso te convertiste en un fenómeno de masas. ¿Cómo le haces, eh?.
Desearía saberlo. También desearía tener tu talento, -escribiendo, claro-. Quizás lograría capturar a algún lector con este texto. Si no lo hiciera, mala suerte. No depende de mí. Se lo dejo a Dios. Como diría tu saxofonista, Clarence Clemons: “Nada más se puede pedir”. ¿Será?. Seguro que sí. Él es una leyenda del rock. Yo no lo soy, pero al menos desearía que, UN LECTOR, fuera a tu concierto el 10 de Diciembre en el DF en el Palacio de los Deportes. Te lo mereces. No en vano, aunque tú, lector, no fueras, la leyenda seguirá girando. Sin embargo, la maquinaria del músico no sería lo mismo sin ti. Necesita tu pasión, tu energía y tu entrega. Bruce se encargará de entregarte el rock and roll. De ti depende disfrutarlo o no).
…Y bueno, pues a cambiar el disco, así como de grupo y estilo. Sustituyes a la E Street Band por la Segger Sessions Band. Grabas con ellos música folk, -en lugar del tradicional rock-, en “We Shall Overcome: The Segger Sessions” en el 2006”. Naturalmente haces la tradicional gira mundial, (de la que se graba un disco con un DVD incluido: “Live in Dublin”), haces un viaje al pasado, (esta vez acompañado, no en solitario como en el 2005, y aprovechas la ocasión para repasar el sonido de “Nebraska”, (del que no hiciste ninguna gira en 1982), pero que se interpretaste ampliamente en 1984 en el “Born in the USA Tour”.
De vuelta al presente en el 2007. Grabas “Magic” con la entrañable E Street Band, esposa incluida por supuesto, y te dedicas a trabajar haciendo lo que más te gusta: rockear. Pasa el tiempo, giras como de costumbre; llamas la atención del Grammy, -algo así como los Oscars de la música, que no ganas, pero no importa porque ya tienes muchos-; y de paso te reúnes con tu grupo de amigos de toda la vida para tocar música. Entre tanto, haces vibrar a millones de fans alrededor del mundo,- como es tu costumbre-, y te haces más rico. ¿Se puede pedir más?. Sí: otro álbum.
Éste llega en el 2009. No es de mis favoritos, aclaro, aunque destaco “Outlaw Pete”. Curiosamente el DVD de la gira: “Live in Hyde Park” es el que mejor captura la energía de tu música. A mi gusto es el equivalente al álbum en vivo “Live 1975 – 85” en su respectivo formato.
Hablando de formatos: esta gira presenta la novedad de presentar, por primera vez, álbums íntegros clásicos de tu catálogo, (“The Wild, The Innocent & The E Street Shuffle”, “Born to Run”, “Darkness on the Edge of Town”, “The River” y “Born in the USA”), integrados en tus tradicionales conciertos de tres horas. Curiosamente, como novedad, el tour cierra con la cereza del pastel: la interpretación completita del primer álbum, (“Greetings from Asbury Park”), con un invitado de honor: tu primer manager, Mike Appel, que te situó en el mapa con la grabación de este CD, así como el genuino “The Wild, The Innocent & The E Street Shuffle” y el inmortal “Born to Run”.
Desde entonces hasta el presente se producen varias ironías del destino: a pesar del éxito y la gira del disco “Working on a Dream”, -2009-, fallece en el año anterior uno de los pilares de la E Street Band: el teclista Danny Federici. A pesar que le sustituye con honores Charles Giordano el sonido ya no es el mismo. Todo fan de la E Street Band lo sabe. Sin embargo, hay que aceptarlo. También hay que aceptar la muerte, por derrame cerebral, del legendario saxofonista Clarence Clemons, integrante de la agrupación desde sus inicios hasta tu último disco. Le sustituye su sobrino: el saxofonista Jake Clemons, miembro oficial del grupo para el tour de tu último álbum “Wrecking Ball”.
Me apena decir al respecto, que no me he tomado el tiempo para escuchar este trabajo. Curiosamente si he oído algunos tracks al disfrutar algunos conciertos, bajados de internet, de este tour. Por lo tanto creo conocer algunos temas sueltos de “Wrecking Ball”. No sabría decirlo Bruce. Tienes la habilidad de cambiar tantas canciones, algunas inéditas, de concierto a concierto, que no me he acostumbrado a ellas. De todas maneras quiero que me sorprendas.
Casi nada te pido, ¿Verdad?. De seguro no te costará trabajo. Por supuesto: tanto tú como tus músicos, la E Street Band, tienen mucha entrega, dedicación e integridad. Incluso, como fan, aceptaría que cancelaran el concierto del Palacio de los Deportes el 10 de Diciembre del 2012, por todas las lecciones aprendidas a través de los años: una persona puede hacer la diferencia, y esa persona puedes ser tú. Gracias Bruce, aunque no te conozca, he aprendido mucho con tu ejemplo, y déjame decirte que lo que me enseñaste, querido amigo, no lo olvidaré nunca.

Gracias Enrique, disculpa si no soy todo lo extenso que debiera, pero con mi problema de artritis créeme que es una tortura escribir por períodos prolongados.
En primer lugar déjame felicitar el estilo que utilizas al hablarle al oído, como un amigo a Bruce, en segundo lugar, la ortografía esta como siempre muy cuidada, y en tercer lugar los datos anecdóticos colaterales, pero como siempre importantes, como la muerte de Clarence Clemons me pareció muy importante e ilustrativa.
Las opiniones personales y particulares que expresas son muy importantes ya que al lector promedio pueden parecerle pretenciosas pero son lo que verdaderamente separa una reseña de un vil copy paste de internet.
Aquí derramas talento redactando y recordando datos precisos e importantes pero los matizas con tu óptica lo cual es a toda luz un acierto.
Claro que lo publicaré a tu nombre y con mucho orgullo, ya que no me equivoqué al invitarte a redactar nuevamente. Disculpa si cometo errores ortográficos o de redacción, estoy cansado y estoy sintiendo un dolor extraño en el costado, pero en unas horas tu texto será reconocible en cualquier buscador de Google, pienso publicarlo no sólo en el grupo de CRONOS tiempo de Todo! sino en internet abierto a través de mis blogs, la gente de Facebook es muy floja y probablemente no lo lea, pero le daré la importancia que merece ya que rara vez la gente responde a mi petición de tomarse el tiempo de redactar algo con cerebro y alma y una respuesta tan inmediata y precisa como la tuya merece destacar.

Me tomaré la libertad de incluír éste análisis de texto porque no critica (Querría hacerlo pero no veo las fallas) y si califica de inusual (porque hoy día lo usual en la redacción de la gente es la mediocridad) y excelente este esfuerzo tan atinado que has desplegado.
Avante con nuevos textos, habla con Freddie Mercury, conversa con Mick Jagger, haz lo que quieras Enrique, pocas personas pueden darse el lujo de escribir con coherencia y pocas pueden reseñar a un artista con conocimiento y ojo crítico, tu has podido hacer ambas cosas, cada que pido que la gente me colabore con textos tengo que lidiar con mala ortografía o con meros "memes" o videos compartidos.
Estoy feliz de que aún a la distancia, tus escritos sean la medicina a el mal que me aqueja: la desilusión.
Un fuerte abrazo.
Tu amigo
Aldo.


Aldo Rodrigo Sánchez Tovar
Fundador de CRONOS Tiempo de Todo!
 
Aquí sigo, en la cueva del Dragón, con tanto fuego adentro.
Mientras el mundo progresa pensando que los dragones son leyendas contadas por viejos supersticiosos.
Buena semana.

Arde mi corazón
Lucha Siempre
Delante del hierro
Ojos venideros...

Sabrán la Historia.
 
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